¿Volver?
Escribo este post inspirado por los correos dominicales de David Bonilla y Jerónimo Palacios, ambos titulados igual: “Volver”. Jerónimo acaba de trasladar su “base de operaciones” a Granada, su ciudad de origen si no recuerdo mal, aunque seguirá trabajando en toda Europa. Y Bonilla analiza la emigración masiva que se dió en España a primeros de la década, cómo muchos informáticos tomaron la decisión de marcharse aún teniendo trabajo de sobra en nuestro país, y si se dan las condiciones para que vuelvan.
Este tema me toca muy cerca porque, como bien sabréis si me seguís con algo de regularidad, vivo en Londres, ciudad a la que me mudé en Abril de 2014. Yo era uno de esos informáticos que comenta Bonilla estaban con trabajo, de hecho en mi último año trabajé en más de una empresa. Aún así decidí hacer las maletas buscando nuevos desafíos.
España vs UK
Porque de eso se trató en realidad, de buscar desafíos. Con 33 años no me apetecía nada quedarme estancado en el rol “Desarrollador Senior” según se entiende en la mayor parte de empresas españolas. Añado esto último porque precisamente una de las primeras cosas que aprendí en UK fue que el puesto de “Senior Developer” puede tener todo el recorrido que quieras sin restricciones de techo salarial o responsabilidades. De hecho, algo que al principió me impactó bastante fue comprobar como determinados puestos de “Project Manager” tenían un salario menor que el de los “Senior Developer” en su mismo proyecto, siendo esto así porque los roles definen responsabilidades y no jerarquías.
Es decir, aunque es inevitable que existan las escaleras corporativas / salariales dentro de una empresa, no existen tanto a nivel de proyecto / equipo, cosa que convierte los puestos de trabajo en algo mucho más estimulante.
Otra cosa interesante que he encontrado es respeto. En ningún caso he escuchado la famosa frase “al menos alégrate de tener trabajo”, que tantas veces oí en España cuando venían mal dadas. Aquí queda claro que en la relación empresa - empleado existe un beneficio mutuo que interesa mantener, y donde la formación constante es también muy importante. Así por ejemplo, nunca me he tenido que ver suplicando a mi responsable que me deje asistir a una conferencia o evento, de hecho en mi actual empresa tenemos un presupuesto anual exclusivo para este tipo de cosas.
Abanico de opciones / Emprender
Desde que descubrí lo fácil que es emprender en UK, siempre he dicho que el verdadero drama de España es la dificultad para el emprendimiento. Si quisiera montar una empresa aquí mañana por la mañana la tendría funcionando, y con posibilidad de facturar de inmediato antes incluso de soltar un penique. Supongo que esto no os resulta nuevo, a España llegan mucho este tipo de comparativas, pero cuando lo vives desde dentro realmente impresiona y da que pensar. Mi mujer, por ejemplo, está trabajando de freelance, y en su declaración de este año le salieron 330 libras a pagar, sin ningún otro gasto adicional. A modo de anécdota, una vez conté en un evento el desembolso que había que hacer en España para emprender, y se empezaron todos a reir porque pensaban que estaba de coña. Cuando me puse serio y dije que era verdad, fliparon bastante.
Si quisiera ofrecer mis servicios como autónomo a empresas de informática, no tendría más que enviar unos pocos currículums, y en poco tiempo habría encontrado una empresa que me pagaría entre 450 y 550 libras al día. Y no me estoy sacando estos números de la manga. El contracting no es algo que me llame especialmente, me gusta la estabilidad de trabajar en un sitio que me guste, pero saber que las posibilidades están ahí da mucha tranquilidad.
Por último, y para puestos de trabajo con contrato permanente, aquí puedes encontrar empresas de todo tipo, por lo que si quieres probar un sector o tipo de empresa en concreto podrás hacerlo en algún momento, es cuestión de paciencia.
Brexit
Puede que más de uno esté pensando si mi opinión ha cambiado tras el voto del Brexit. Bien, mi respuesta es contundente: no, todo lo contrario. Tras el Brexit mi empresa, Pivotal, se ha volcado para que los inmigrantes nos sintamos totalmente acogidos, en Londres he notado que el sentir general hacia nosotros es de agradecimiento, y la ciudad está intentando abrirse más que nunca. Así que, personalmente, el Brexit no me ha hecho replantearme si quedarme aquí o volver, aunque está por ver cómo responderá la economía en caso de ruptura total con la UE.
Quizás si viviera en otras ciudades más pequeñas habría notado una diferencia, no lo sé. Pero sí quiero añadir algo, a mí personalmente me repatean el racismo y xenofobia en cualquier dirección, y no creo que en España se pueda sacar demasiado pecho en cuanto a la falta de racismo. Empecemos mirando nuestro propio ombligo, y este es un mensaje para los medios de comunicación españoles, que tanto alarmismo están levantando últimamente hablando del Reino Unido.
¿Volver?
Me consta que en los últimos años nuestro sector está mejorando mucho en España. Empezando por las comunidades, que dan cabida a eventos como el Codemotion o montones de meetups, sobre todo en Madrid y Barcelona, pasando por empresas españolas con ganas de cambiar las cosas (Codesai, LogTrust…), y terminando por importantes empresas internacionales que han decidido abrir oficina (Codurance y Thoughtworks a la cabeza).
David Bonilla ha metido el dedo en la llaga hablando de los lazos familiares. Tener a toda la familia y amigos lejos se hace duro en muchos momentos, yo aún no tengo hijos, pero sé lo complicado que sería dar ese paso, por ejemplo. Tampoco he tenido mala suerte, de momento, en cuestiones de salud. Todos estos factores pueden suponer un buen empujón para tomar la decisión de volver.
Así que, quien sabe, quizás vuelva algún día, aunque de hacerlo, me gustaría poder hacer valer toda la experiencia que he ido adquiriendo aquí, principalmente a nivel de idioma. Aprender un segundo lenguaje en condiciones está siendo muy complicado, y no quiero pensar que no pudiera seguir sacándole partido en un futuro. También me gustaría que se pudieran dar la mayor parte de las circunstancias que he comentado en este post, aunque algunas de ellas me parecen una utopía.